Ingredientes:
8 trozos de merluza de anzuelo
3 manojos de ajos tiernos
1/2 l. de aceite de oliva
200 gr. de harina
1/2 l. de Vermouth Miró Bianco
Fumet de pescado
Sal
Pimienta blanca molida
Elaboración:
Comienza limpiando los ajos tiernos, separando la parte verde de la parte blanca. La parte verde la trocearemos finamente, ya que se utilizará primero en la preparación.
En una cazuela con un poco de aceite de oliva, fríe los trozos verdes de los ajos a fuego medio. Cocina hasta que adquieran un color dorado, lo cual debería tomar entre 10 a 15 minutos. Esto ayudará a extraer el sabor de los ajos en el aceite. Una vez los ajos verdes estén dorados, añade Vermoth Miró Bianco a la cazuela. Permite que se reduzca durante unos minutos para que el alcohol se evapore y concentre los sabores.
Agrega una cucharada de harina a la cazuela, como si estuvieras preparando una roux. Remueve bien hasta que la harina se disuelva por completo, evitando que se formen grumos. Este paso ayudará a espesar la crema.
Después de integrar bien la harina, vierte el fumet de pescado en la mezcla. Añade sal y pimienta al gusto. Cocina todo junto hasta que obtengas una crema de consistencia suave. Para que la textura sea aún más fina, pasa esta crema por la batidora.
Enharina ligeramente los filetes de merluza y fríelos en una sartén con aceite caliente. Cocina durante aproximadamente 1 minuto por cada lado para sellarlos, sin cocinarlos por completo. Este paso es solo para dorarlos ligeramente. En una cazuela de barro, añade un poco de aceite de oliva y dora suavemente los trozos de la parte blanca de los ajos tiernos. Es importante que no lleguen a tomar mucho color, solo queremos que se impregnen de sabor.
Coloca los trozos de merluza dorados en la cazuela de barro junto con los ajos blancos. Cubre todo con la crema de ajos que preparaste anteriormente. Cocina a fuego bajo durante unos 5 minutos para que los sabores se integren y la merluza termine de cocerse. Sirve el plato en la misma cazuela de barro para una presentación rústica y apetecible. Esto mantendrá la preparación caliente y realzará el sabor de los ingredientes.